martes, 5 de enero de 2010

Influir en tu destino

Todo es cuestionable, cierto, pero cada cual debe regir su vida por una serie de principios, máximas,dogmas o paradigmas. Aunque algunos de esos principios sean modificables o adaptables en función del proceso evolutivo del interesado/a es evidente que a partir de cierta edad ya tenemos conformado u YO. A veces es tan inamovible y cuadriculado que nos perdemos durante años la enorme sensación de cambiar cuando uno lo cree oportuno. Esa falacia de "yo soy así y al que no le guste que no mire" es el principal enemigo de la evolución y el crecimiento personal.
Cuando lo inteligente sería decir "soy así por ahora, pero a partir de hoy voy a ser como yo quiera"
Bien pues en mi opinion es este concepto el que nos da la llave para influir en nuestro destino. Es fácil, primero decides como te gustaría que fuese tu vida, con que tipo de personas te gustaría relacionarte o que tipo de experiencias te gustaría tener. Despues debes r poco a poco modificando tus hábitos, los sitios que frecuentas, o qe no frecuentas, tu estilo de ropa, hasta tu lenguaje. De manera que lo hagas coincdir lo mas posible con tu ideal.

Así conseguimos influir en los encuentros "casuales" que rigen nuestro destino. Se trata de tomar un atajo y aplicarse lo de, si mahoma no va a la montaña, la montaña irá a mahoma.

En fin para la próximas entrada unos truquitos para experimentar esto y unas alusiones a una especie de corriente cuyo lema es "lo semejante atrae lo semejante" tambien conocida en el mundillo de la autoayuda como la "El secreto" o "La ley de la atracción"

Vale la pena introducir en google estos términos y ehar un vistazo. Nada mas por hoy que recomendar con pasión el disco de Fito "antes que cuente diez" una pasada.

viernes, 2 de octubre de 2009

Las casualidades

casualidad.
(De casual).
1. f. Combinación de circunstancias que no se pueden prever ni evitar.

Esta es la definición del diccionario de la real academia de la real lengua de la real España (o como diría un cañí, "eepañiaa coñoo") Diez palabras que sólo combinadas de esta manera ofrecen una clase magistral de como la sintaxis de un idioma explica algo tan inexplicable.

Me explico: Todos los acontecimientos de la vida de una persona tanto los importantes como los nimios, los alegres y los trágicos, los trascendentales y los cotidianos, los vitales y los innecesarios, los deseados y los intrascendentes se producen en tu vida por un cúmulo de casualidades que en principio no se pueden prever. Así es como hoy estoy en mi nuevo empleo o vivo con mi adorable mujer, o tengo dos hijos en lugar de cuatro no soy ingeniero, ni ruso,ni mormón...conduzco este coche o vivo en esta ciudad.

A veces es frustrante pensar que todo ocurre por casualidad, si, es cierto que nuestra voluntad hace que decidamos (o eso creemos nosotros) nuestro destino (otros creen que esta escrito; ilusos) sin embargo lo cierto es que cada decisión es solo la elección de qué casualidades dejaremos que nos dirijan. Casi siempre estamos eligiendo un camino u otro, aveces literal mente como cuando vamos de compras o paseamos, cuando salimos de copas etc. y con cada decisión vamos escribiendo las líneas generales de nuestro destino. Acaso no fue por casualidad que conocemos a la persona con la que convivimos? o la casa donde dormimos o el trabajo que tenemos?. Si hacemos memoria y retrocedemos en cada hito de nuestra vida encontaremos sin lugar a dudas que todo parte de una casualidad y que a partir de ella se han ido conformando otro sinfín de casualidades que juntas forman un hecho.

La cuestión es: Podemos influir en este sinfín de casualidades y coincidencias? La respuesta es Si.

A través de lo que pensamos...

continuará...

domingo, 22 de marzo de 2009

mañana empiezo que está empezando Aida...